ellos, 8 meses, no leo blogs, no leo, releí, sí, una novela de highsmith. De pronto veo que tengo dos monigotes que andan por toda la casa, se pisan la cara, le tiran de las orejas al perro, sonríen, se ríen, hablan entre sí, se tiran del pelo, de pronto pueden pasar 15-20 minutos unattended, es insólito, duermen 12 horas a la noche más 2 siestas.
fuimos al cine hace un mes y fui muy feliz, vi el origen de la vida y fue notable por mi coyuntura. mi padre ve las fotos de las primeras vacaciones con niños y los considera almorzables y por lo tanto recomienda mantenerlos fuera del alcance de mi hermana. en menos de un mes, vuelo a bsas, con sólo una cuna asegurada, dudamos si llevar al perro, muchas ganas de estar ahí en ojotas y bikini, una hermana nos presta su ph con patio y terraza, demasiado bueno.
hace una semana volvimos de la playa, primer y muy exitoso viaje con los niños.
me re incorporé al club de lectura y alguien me dijo "estás viendo la luz al final del tunel y tenía razón". hicimos buceo en las minivacaciones, clase teórica, práctica en la pileta luego salida en lancha y 10 metros de profundidad, mucho estrés, cero relajado, estábamos en méxico pero era todo en inglés, éramos los únicos latinos además de los que manejaban la lancha y algunos instructores, la clase teórica fue con un pastor americano de 60 y pico y él tampoco la pasó bien "out of my comfort zone, I never felt comfortable".
domingo, noviembre 20, 2011
miércoles, noviembre 02, 2011
después de 2 meses y medio
de luchar con poner chupetes que se caían, dar mamaderas y levantar de la cuna una u otra vez, decidí volver a dormir y por consiguiente, dejar llorar y fui tranquila otra vez. los chicos están en una etapa muy comestible y era una pena total estar tan destruida. volví a dormir de corrido y me despertaba con dolor post ejercicio.
lei unos libros sobre maternidad por primera vez, nunca antes me había interesado o lo había necesitado y fueron muy reveladores. uno fue conozca a su hijo, the child and the family, 1957, de winnicott:
"Su bebé no depende de usted para su crecimiento y desarrollo. Cada bebé es una empresa en marcha. En cada uno de ellos existe una chispa vital, y ese anhelo de vida, crecimiento y desarrollo forma parte del bebé, es algo con lo que el niño nace y que se cumple en una forma que no necesitamos comprender.
Probablemente, sus propios hijos esperan que usted sepa lo que quiere y en qué cree, pues su fé los ayuda y en mayor o menor grado, basarán sus propias normas en las suyas. Pero, al mismo tiempo, y esto es lo más importante, ¿no cree usted que los niños mismos tienen también sus propias creencias e ideales, y su propio criterio para establecer un determinado orden de cosas? A los chicos no les gusta ni el caos ni el egoísmo perpetuos. ¿Se da cuenta de que puede dañar a su hijo si está tan preocupada por establecer sus derechos en su propia casa, que no puede comprender ni permitir la tendencia innata de su hijo a crear en torno de sí un pequeño mundo con su propio código moral? Si usted se siente bastante segura de sí misma, creo que disfrutará comprobando hasta dónde puede dejar que cada uno de sus hijos domine la escena con sus propios impulsos, planes e ideas de forma localizada, dentro de su más amplia esfera de influencia. "
lei unos libros sobre maternidad por primera vez, nunca antes me había interesado o lo había necesitado y fueron muy reveladores. uno fue conozca a su hijo, the child and the family, 1957, de winnicott:
"Su bebé no depende de usted para su crecimiento y desarrollo. Cada bebé es una empresa en marcha. En cada uno de ellos existe una chispa vital, y ese anhelo de vida, crecimiento y desarrollo forma parte del bebé, es algo con lo que el niño nace y que se cumple en una forma que no necesitamos comprender.
Probablemente, sus propios hijos esperan que usted sepa lo que quiere y en qué cree, pues su fé los ayuda y en mayor o menor grado, basarán sus propias normas en las suyas. Pero, al mismo tiempo, y esto es lo más importante, ¿no cree usted que los niños mismos tienen también sus propias creencias e ideales, y su propio criterio para establecer un determinado orden de cosas? A los chicos no les gusta ni el caos ni el egoísmo perpetuos. ¿Se da cuenta de que puede dañar a su hijo si está tan preocupada por establecer sus derechos en su propia casa, que no puede comprender ni permitir la tendencia innata de su hijo a crear en torno de sí un pequeño mundo con su propio código moral? Si usted se siente bastante segura de sí misma, creo que disfrutará comprobando hasta dónde puede dejar que cada uno de sus hijos domine la escena con sus propios impulsos, planes e ideas de forma localizada, dentro de su más amplia esfera de influencia. "
Suscribirse a:
Entradas (Atom)