Un post de la semana pasada, sin subir.
Primer día gris completo de esos que me dan ganas de tomar té todo el día y estar bien abrigada. Día raro, ya casi me olvidé que hice una clase de seudo ashtanga y que el profesor era en apariencia un gay de esos toquetones y que las chicas ansían. Era un rey del flirteo y el cachondeo. Pero no sé si la clase me gustó, medio desorganizada, con las posturas desordenadas y muy entrecortado todo y yo soy así, no quiero un espejo, quiero una clase aburridamente rutinaria donde ya me sepa las posturas de memoria y quiero corrección, quiero corrección, que la espalda esté bien derecha, las costillas adentro como si me estuviera riendo, fue lo único que me quedó de las "clases" de pilates.
Es el segundo lugar de ashtanga, la clase estaba repleta, llena de mujeres y sólo tres tipos, incluido el profesor. Encima llegó tarde y eso es muy raro porque es como anti-ashtanga.
Caminé de Condesa a Polanco, no sé bien cómo, la verdad. Es rarísimo. Code me ruega que me cuide y no me mande por cualquier lado. Pero yo no me mando mal, lo hago con responsabilidad y criterio. Además, parezco mexicana.
La tarde siguió con un vaivén de llamadas a Irma y Blanca (es como la madre de The Nanny pero muy flaquita, bajita y elegante; la voz parece de mentira, un doblaje de los Simpson o algo ). Tenían que mandarme el contrato de alquiler, me lo mandaban, lo leía se los corregía y me lo reenviaban con los cambios. Así leí tres "ediciones". Mañana me encuentro con el Señor C. en el depto para que me conozca y ver bien el depto.
Vamos a vivir en el borde de Polanco, en el borde del bosque para ser más exactos.
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