jueves, diciembre 19, 2013

Mis poleas


¿Qué creo de la maternidad?  Después de practicar el oficio tres año tal vez ya tenga alguna idea.  
Primero que todo, que definitivamente y bajo todo aspecto que no me hace mejor persona, diría que me expone como la puta madre y segundo que me acerca un pasito más al fin fin. Sobretodo que esas bolas de amor me dan una sensación muy fuerte de pertenencia. Es terrible porque esas bolas están en fuga desde que nacen.

Y es verdad que crecen. Yo clamaba que crecieran a los gritos.

Acá duermen la siesta dos nenes que conversan entre sí, se dan de comer el uno al otro, se empujan, abrazan, se llaman y pelean, urden planes, copan rincones y arman poleas con cualquier manija y con cualquier objeto que tenga una cinta. Recién hace poco entendí su juego.
Mañana van a viajar en avión por primera vez ocupando asiento.