jueves, mayo 17, 2012

Mi ventana indiscreta

Mi mamá me está haciendo favores en Buenos Aires y me manda mails: que dicen A-L-E-E-L-U-Y-A-H1, A-L-E-E-L-U-Y-A-H2, aleluya!!! TOTAL!!!! Son las pequeñas hazañas cotidianas, singulares conquistas que alegran nuestros días. Yo hay empecé muy bien el día, con buenas noticias, logros personales, personal branding que le dicen, autobombo, en criollo. después se fue oscureciendo el cielo y me cagó el service de la heladera rotundamente y tuve un problema administrativo pero vi a una amiga que me contó del inicio de un romance y mi enamorado está lejos y sentí mariposas. Lo que la distancia le hace al amor.
Amo mi casa, es la ventana indiscreta, convivo con mis vecinos: mis amados violinistas rusos judíos, ahora huelo los perfumes de su cocina, deberían invitarme a cenar porque me está matando, mi vecino Pepe de planta baja, cubano de nacimiento y encantador, mi vecina cecilia, administradora y entusiasta admiradora de mis niños. Yo dejo las cortinas abiertas, que me miren y espien, siempre añoré visitar las casas de mis vecinos, y con la disposición de mi edificio de 1930, de alguna manera lo logro, veo sus cicinas, los adornos, repasadores, plantas, agarraderas, tapas y tarritos.

1 comentario:

inés dijo...

qué lindo! ¿cómo podés hacer para que te inviten? o a lo mejor es más lindo la ventana indiscreta.