martes, agosto 04, 2009

ayer a la tardecita no tenía

ganas de ir a dar clase, a pesar de que adoro a mis indios, no tenía ganas de ponerme la ropa de maestra, quería quedarme en el disfraz de bici fija y el pelo revuelto, pero sin opción empecé con pruebas de ropa y sospeché que el SPM estaba en todo su esplendor. quedó clarísismo cuando, a la noche y ya de vuelta, le comenté a c: los programas no me suelen afectar, pero este de louie theroux me parece muy angustiante.

para dar clase a ejecutivos salgo de los vestidos y hush pupies rojas, uso algo con taco y trato de "verme elegante" aunque, como me dijo una vez una alumna alemana, siempre tenga algo salido de lugar, un pelo, un cuello, una pelusa, me imagino, porque, por supuesto, no lo noto. pero ayer ese esfuerzo me costaba y la tormenta amenazante era la excusa perfecta para ir más informal.

con culpa me embarqué más desarreglada de lo habitual: jean gris oscuro, camisa verde a cuadros, botas con puntera redonda, perfectas para la lluvia post clase y estilo las australianas que no recuerdo el nombre, y piloto negro.

llegar y ver a mis alumnos tan exhaustos, me hizo olvidar la ropa, habían empezado a las 7 am y aún les quedaban dos webconferences, a las 20 y 22.30. a mí muchas veces me dan pena, c dice que nada, que lo eligieron, les deben pagar muy bien, yo no lo creo, los peno y en mi estado de ayer, todavía mucha más pena. igual no soy tan naive como para hacérselos notar, sería como un insulto.

un día quiero que vayamos a comer, a dawat por ejemplo, porque me dijeron que tandoor es un fiasco y uno tiene una hija de un año y medio, me la imagino absolutamente preciosa, con ese color de piel tan oscura y alucinante que tiene su padre y los dientes muy blancos. quiero que la lleve, que todos lleven a sus hijos y esposas, yo no, yo voy sola. pero no sé si a ellos les gustaría este plan , me suena que no.

hay cosas tremendamente ridículas a las que nos enfrentamos.en nuestras dos clases semanales . por ejemplo, la primera hora de clase se desarrolla con buena luz eléctrica y la última media hora, gracias a la política de ahorro energético que el banco hace cumplir a partir de las 19.30, se desarrolla en penumbras.

en un par de semanas la oscuridad va a ser total. la verdad es que me saca de onda, pero a ellos parece no importarles. escribí para ver qué se puede hacer y no recibí respuesta, ahí es cuando pienso que ellos no eligen mucho, también el otro día uno me dijo: "no voy a venir por un mes, me voy a colombia, me avisaron esta mañana". es el soltero sin hijos, no sé si lo habrán mandado por eso. pero era evidente que no le gustaba mucho. antes otro había estado 3 semanas en perú.

yo ya entendí cómo viene la mano y tengo mi propia agenda, que compren la ficción de vivir en otro país: hablar otro idioma, comer otra comida, oler otras cosas y gustar diferente.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

de qué trabajan tus indios?
anne

Graciana dijo...

hola anne, mis indios trabajan en el departamento de informática de un banco.

inés dijo...

cuando yo tengo el black dog sabés qué me agarra, que me siento tan mal qeu me pongo ropa discordante, ,de colores fuertes, trato de vestirme mejor que nunca, lo hago sin darme cuenta, como que necesito brillar por fuera para no sentirme invisible...